Viajar con niños: la realidad por How About Mom
Llevar a tu bebé en sus primeras vacaciones no siempre es tan idílico como nos hace creer Instagram en sus imágenes perfectas. Si te somos completamente sinceros, probablemente estarás preparado para tener otras vacaciones después de las que acabas de disfrutar. Sin embargo, con una buena preparación, una dosis de flexibilidad y la habilidad de poner las cosas en perspectiva, ¡todo te irá genial!
Cuando viajas con bebés o niños pequeños experimentarás una gran variedad de emociones.
Desde la pura felicidad ("¡Esto es increíble, estoy de vacaciones con mi bebé!") hasta pura frustración ("¡¿Cuándo tengo tiempo de relajarme?!") y todas las emociones que vengan en medio. Habrá momentos en los que estés disfrutando a tope de esta maravillosa aventura y, habrá momentos en los que realmente solo querrás hacer las maletas e irte a casa. Habrá altibajos, momentos de subidón (¡tu bebé ha dormido toda la noche del tirón!) o momentos no tan agradables (mareos en el viaje, olvidar llevar los pañales o no tener ropa de bebé de repuesto cuando más la necesitas). En resumen: sin duda, no será aburrido. Te darás cuenta porque son importantes la flexibilidad y la capacidad de poner las cosas en prespectiva. Paradas repentinas para ir al baño, siestas inesperadas y parques infantiles en lugar de la visita planificada al museo: todo forma parte del juego, así que, ¡trata de ver su encanto!

La preparación es clave, especialmente en unas vacaciones familiares.
No subestimes la cantidad de cosas que necesitas llevar cuando viajas con niños. Los tiempos en los que solo llevabas una maleta de mano para unas vacaciones de 2 semanas, ya se han acabado... En función de la edad de tus hijos y del tipo de viaje, tenemos una palabra sencilla para ti: tentempiés. Asegúrate de que siempre haya bastante comida y, literalmente, ¡mantendrás dulces a tus peques! Un bañador o unas gafas de sol se pueden comprar cuando llegues a destino, pero un viaje largo en coche o un vuelo sin nada para picar que los distraiga puede ser un desastre.

Póntelo fácil como padre o madre.
Escoge una silla de paseo ligera que sea fácil de maniobrar y lo suficientemente robusta para respaldarte en todas tus aventuras. La Bugaboo Butterfly se pliega muy compacta y es compatible con IATA, que es un tamaño estándar para equipaje de mano. Dicho de otra forma: esta silla de paseo se pliega lo suficientemente pequeña como para llevar como equipaje de mano en el avión dentro de su propia bolsa. Esto te ahorrará muchísimo estrés y preocupaciones ("¿El carrito realmente subió al avión?" o "¿En qué condiciones encontraré mi carrito cuando lleguemos a nuestro destino?"). ¿Viajas en coche y quieres asegurarte que tu bebé tiene una cama segura y cómoda para dormir en tu destino de vacaciones? Entonces, ¡lleva tu propia cuna de viaje!
No nos andamos con rodeos
Viajar con niños pequeños es un reto. Un trayecto lleno de baches y giros inesperados. Pero entre todos estos desafíos, se crean recuerdos preciosos, tu vínculo familiar crece y podréis descubrir el mundo juntos. Así que, ¡haz las maletas con esa bolsa de pañales, abraza al caos y sal a la carretera! El trayecto es tan importante como el destino, especialmente con los peques a bordo.